lunes, 23 de enero de 2012

MENE de Ramòn Diaz Sanchez

Ramòn Dìaz Sànchez  logra lanzar un doble mensaje que tendrà profunda repercusiòn en la narrativa venezolana, llama la atenciòn hacia los turbulentos conflictos sociales y econòmicos desatados por la invasiòn a las regiones petrolìferas por parte de las empresas extranjeras y al mismo tiempo señala el camino para el cultivo de una novela semiurbana, en que el medio laboral  formado en la explotaciòndel rico subsuelo reemplaza lo rural coomo punto focal de la narraciòn.

El cambio de la estructura ecònomica no tendrà lugar sin larga y costosacrisis en lo social. Mene cumple la funciòn inescapable al escritor de alertar y señalar rumbos en momentos decisivos. Describe un mundo de explotaciòn, de indignantes entregas por parte del criollo indolente; de extranjeros sedientos del negro jugo que es motor de la civilizaciòn y conocedores de los resortes corruptos que utilizan a discreciòn ; de prejuicios raciales himillantes; de desprecio a la vida humana. Màs el buen gusto, el sentido comùn y el equilibrio artìstico de Ramòn Dìaz Sànchez, le han permitido ser una novela integral, colectiva y no sextaria.

     Relata acontecimientos que suceden en Cabimas y Lagunillas:  (Selecciòn)

    " Aquello es Cabimas, punto central de referencia en la geografìa de la regiòn.  Todo aquello negro que hace guiños sobre el lago, al pie de los cocales, es petròleo . Ya lo conociamos de antaño, pero no con este nombre. Lo llamamos mene. Los indios y los españles venìan a embrear sus naviosy los ùltimos le llamaban pisafalto y pixmontaña.  Màs alla hacia el norte està Ambrosioclàsico solar de aldea, recuerda el alemàn Alfinger que le diò su nombre. Y las misiones, memorable altura donde los indios ictiòfagos llegaron a probar carne de frailes. Hacia el sur, Las Rosas.. En Tamare tenemos que encontrarnos con los que vienen de Lagunillas ".

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